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uando me diagnosticaron la enfermedad en junio de 2010, fue un duro golpe. En ese momento todo cambia, percibes la tremenda fragilidad del ser humano, sientes el miedo a dejar a una mujer sola, una hija sin padre y a unos padres sin hijo.

Un buen amigo me recomendó leer un monólogo de Facundo Cabral y la verdad es que me ayudó mucho, lo llevo en mi mochila y lo leo cada día. Otro buen amigo que padece mi misma enfermedad me dijo, "acércate a Dios, no te defraudará", y la verdad es que todo tiene su parte positiva, el palpar en primera persona esa fragilidad que yo mencionaba, te hace estar presente en otra dimensión, y crecer.

He aquí un relato estremecedor de un hombre al que conmovió Facundo Cabral.

Yo era un joven frio y aferrado a la materia y ahora soy pura emoción. La enfermedad me está haciendo conocer lo mejor de mí mismo y a la vez dar a los demás lo mejor de mí.
Un día, mientras le leía a mi padre la carta de un amigo, no pudimos contener las lágrimas y fundirnos en un abrazo que nunca olvidaré, como podemos ver, gracias a algo aparentemente malo hay algo bueno.

Afortunadamente la medicina ha avanzado mucho en hematología, y cuando por fin los médicos le pusieron apellidos a mi leucemia, “leucemia mieloide crónica”, y me explicaron el tratamiento me tranquilice. Desde hace diez años esta enfermedad se controla con medicamentos llamados de blanco molecular, que atacan a la base genética que origina la enfermedad sin causar daño al resto de células, y ya no es necesario pasar por la quimioterapia y el trasplante de médula.
Se trata de una enfermedad en la que se ha investigado mucho, no obstante, es crónica y siempre va a estar ahí, es como si Dios haya elegido esta enfermedad para que siempre de lo mejor de mí a los demás.
 
Ayer el amigo que me recomendó el monologo, y que yo a la vez recomiendo su lectura a través del foro de la Fundación Carreras , me envió una entrevista que le realizaron a Facundo Cabral en México, me emocioné al escucharlo y ese fue el motivo por el que escribí el comentario puesto que al leer esta página que homenajea a Facundo Cabral me sentí totalmente identificado en la misma. Insisto, muchísimas gracias amigos de la página, es un placer conocer personas que tienen una clara de voluntad de ayudar a los demás y, como se sabe, todo lo relacionado con Cabral tanto tiene que ver con la propia vida.